Desde hace siglos se dice y se cree que tu infancia (en manos de los que te criaron) determina tu futuro.
La reflexión y las demostraciones científicas se desarrollaron en los siguientes campos: la composición genética, la autoestima, el apego y el contexto.
GENÉTICA: los padres no son responsables de tu composición genética porque no tuvieron ninguna injerencia sobre ella, excepto acerca de la elección de su pareja. Aunque hay hipótesis de que con padres sometidos a mucho estrés, puede modificar los genes, apagando los receptores de la hormona del estrés.
AUTOESTIMA: la autoimagen puede dañarse con la desaprobación paterna, pero la autoestima nunca se consolidad en la niñez. Su nivel se mantiene variable hasta los 30 años. Y la autoimagen depende mucho más de factores sociales y publicitarios. Los hijos de padres divorciados son más realistas, pero no afecta la autoestima de los jóvenes adultos.
APEGO: “seguro” es cuando los niños confían que los padres responderán a sus necesidades. Parece que serán personas adaptables y seguras. Sin embargo también está demostrado que los que tuvieron alguna clase de apego “inseguro” se encuentran propensos a enfrentar mejor problemas psicológicos y desventajas sociales.
CONTEXTO: (estudios sobre gemelos idénticos) existe una diferencia del 10% atribuible al entorno familiar. La crianza tiene menos impacto en cómo nos comportamos que lo que quisiéramos creer. Es cierto que los padres tratan diferente a sus hijos, y que las condiciones de las relaciones de parejas son diferentes de un hijo al otro. Pero será la funcionalidad del sistema familia la que irá diseñando roles variables y equilibrios dinámicos. Tú también creaste tu entorno y te toca una parte de la responsabilidad.
Pero se olvida que las personas no se vinculan de la misma manera a lo largo de toda su vida. Además si bien es frecuente que se repitan conductas de una relación de pareja a otra, es igualmente cierto que hay personas que sacan de nosotros conductas y sentimientos inéditos. Si reaccionáramos de la misma manera con todo el mundo habría que pesar que tenemos un mecanismo de adaptación deficiente.
La conclusión final es que si estás en la edad adulta tienes que hacerte cargo de tu vida y moldearla como a ti te vaya pareciendo bien. Haciéndonos responsables de TODAS nuestras creencias, independientemente de nuestro tipo de apego, de la educación y del contexto.
Y que términos generales la psicología a veces puede encontrar explicaciones de porqué “las cosas salieron mal”. Pero resulta casi imposible explicar que, aún en las peores condiciones en todas los campos, hay personas que son impecables. PENSAR EN PADRES CULPABLES NOS LIMITA.